
Municipios por la Tolerancia es un programa para ayudar a los gobiernos locales a gestionar la diversidad religiosa de una manera democrática, inclusiva y plural, con el que pretende visibilizar el compromiso de los ayuntamientos con la aplicación de unos principios y objetivos básicos en la gestión de la diversidad religiosa contenidos en una Carta para la Gestión Municipal de la Diversidad Religiosa. Su finalidad es proporcionar a los municipios participantes las herramientas y recursos necesarios para mejorar su gestión cotidiana de esta realidad.
Los municipios que se adhieren a esta iniciativa, obtienen una serie de ventajas tales como acceso a un cuestionario de autodiagnóstico sobre el nivel de adecuación de su gestión a esta realidad social, facilitándoles unas orientaciones en la implementación de medidas concretas. A su vez, se les brinda asesoramiento técnico especializado, formación ajustada a sus necesidades y la participación en foros de intercambio de experiencias entre municipios
Para participar en el programa Municipios por la Tolerancia, los municipios solicitan adherirse a dicha Carta con el compromiso de orientar su gestión de la diversidad religiosa de acuerdo a los siguientes principios y objetivos:
- El reconocimiento de la diversidad religiosa en el municipio como expresión de la riqueza cultural y el pluralismo de la sociedad, así como de la necesidad e importancia del conocimiento permanente de dicha diversidad
- La garantía, dentro ámbito de sus funciones, del ejercicio de la libertad de religión, así como la promoción de las condiciones para la igualdad y la libertad de las personas y de los grupos en que se integran sean reales y efectivas.
- La eliminación de toda forma de discriminación injustificada basada en las creencias, así como el fomento de políticas, acciones positivas y ajustes o acomodos razonables dirigidos a este fin.
- El fomento del respeto, la comprensión y la tolerancia hacia la diversidad religiosa
- El impulso de la coordinación y colaboración interadministrativa para la mejor gestión de la diversidad religiosa, estableciendo canales de diálogo y acuerdos, en su caso, con otros municipios, asociaciones de municipios y otras instancias administrativas de todos los niveles.
- La adopción de mecanismos de consulta y participación de las comunidades religiosas para dar respuesta a las necesidades derivadas del ejercicio de la libertad religiosa, garantizar la integración de los grupos minoritarios y evitar situaciones conflictivas.
- La promoción de espacios de diálogo y conocimiento mutuo entre las iglesias, confesiones y comunidades religiosas del municipio, así como éstas con otros sectores de la población y con el conjunto de la ciudadanía.
- El fomento de la investigación y la formación correspondiente en la materia para las personas que trabajan en la administración municipal.
- El compromiso en alcanzar la mayor difusión de los principios y objetivos de esta Carta entre las autoridades, organizaciones y ciudadanía en general.